DEPORTIVO ALIANZA: MAL DENTRO Y FUERA DE LA CANCHA

vivevoley.com 

Por lo hecho en la primera ronda de la Liga Nacional Femenina es uno de los equipos que, de no experimentar un cambio radical, peleará por no perder la categoría. De ser así, Deportivo Alianza viviría una historia totalmente distinta a la de la temporada pasada en la que de la mano de las hermanas Uribe -hoy en Alianza Lima- y de Carol Aguilar llegó a ubicarse entre los cuatro mejores elencos del campeonato.

En la presente edición del torneo, el ‘Depor’ es el colero absoluto con apenas tres unidades. De los once partidos que disputó perdió 10 y sólo ganó uno. Números que hablan de una pésima campaña. ¿Es sólo responsabilidad de las jugadoras y del comando técnico o tambièn de los dirigentes del conjunto de Pueblo Libre cuya cabeza es el señor Alberto Olivos?

Una de las cosas que más llamó la atención en las últimas fechas de la primera fase fue la ausencia de dos de las pocas jugadoras con experiencia que contaba el equipo: Carol Aguilar y Lissette Zuluaga.

Este blog le preguntó hace unas semanas al entrenador del ‘Depor’, Raymundo Valverde, el motivo de la ausencia de la armadora Aguilar. El técnico sólo atinó a manifestar, con cierto fastidio por la interrogante, que se debía a un problema entre la voleibolista y los dirigentes. 

CERCA A LA NET indagó sobre la veracidad de este espinoso asunto y pudo conocer por fuentes fidedignas que el alejamiento de Carol Aguilar se debería a las serias discrepancias con el estratega mencionado por su forma tan, por decirlo de alguna manera, poco alturada para dirigirlas. “No tiene un buen trato con las chicas y eso a las más jóvenes les choca bastante”, nos contó nuestra fuente.

Asimismo, pudimos conocer que la relación entre Aguilar y el propietario del club Alberto Olivos se habr{ia terminado de romper cuando la levantadora recibió dos propuestas para jugar por otras escuadras capitalinas, pero recibió un no rotundo por parte de Olivos quien se negó a entregarle su carta pase.

En el caso de Zuluaga se trataría, al parecer, de una desconsideración inaceptable. Según nos reveló nuestra fuente la zurda tenía la rodilla hinchada y los dirigentes en vez de buscar la forma de atenderla se hacían de la vista gorda. Esto irritó a la voleibolista y se fue del club. Otra jugadora que se retiró fue Sofía Salas.

Ante esta situación, y con la finalidad de completar la plantilla para jugar sus partidos de la Liga, el Deportivo Alianza ha tenido que recurrir a sus juveniles e incluso a varias de sus jugadoras de las categorías menores. E, increíblemente, Juana Olivos, hija del señor Alberto y que funge como presidenta de la institución, también se ha tenido que vestir de corto para formar parte del plantel.

Por lo visto, la triste realidad que vive el ‘Depor’ no sólo se limita a lo que sucede dentro de la cancha, sino también fuera de ella. Y así, la responsabilidad de lo que sucede al equipo no sólo es de quienes entran al campo de juego, sino además de quienes están sentados en un escritorio y con sus decisiones llevan a buen puerto o la deriva a su institución. Por ahora, todo indica que está sucediendo lo segundo.