Al final del partido los hinchas aliancistas tributaron sonoros y prolongados aplausos a sus jugadoras. Más que merecidos, por cierto. Pero hubo un nombre en particular que entonaron con cristiana reverencia: el de Mirtha Uribe. La capitana aliancista fue la pieza clave que condujo al cuadro de La Victoria para conseguir una espectacular remontada y derrotar 3-2 a Sporting Cristal, en lo que fue el partido más atractivo de la jornada sabatina de la Liga Nacional Femenina.
El buen marco de aficionados presentes en el coliseo miraflorino y el ambiente que se vivía en las tribunas eran propicios para que se lleve a cabo un intenso y electrizante encuentro. Todo dependía de ambos sextetos. Y para felicidad de quienes siguen con fruición esta disciplina las jugadoras de los dos bandos no los decepcionaron. Fue un duelo bastante parejo en lo bueno y lo malo; en virtudes y defectos. Pero lo cierto es que los que llegaron al Bonilla se fueron más que satisfechos por el buen juego que apreciaron.