En un partido que despertó mucho interés, pero que al final no colmó las expectativas, Deportivo Géminis derrotó, en tie break, a su similar de Alianza Lima y mantuvo su invicto en sus ocho encuentros ya disputados. En el choque de fondo del doblete programado este viernes en el coliseo Bonilla, Latino Amisa se impuso 3-0 a Wanka.
NI CLÁSICO NI BUEN JUEGO
El duelo entre Alianza Lima y Géminis se había empezado a vivir muchos días antes. En las redes sociales, los fanáticos de ambos conjuntos invocaban sus pares a asistir al coliseo para alentar a sus colores. Dicho encuentro se había denominado “El Nuevo Clásico del Voleibol Peruano”. Nombre ostentoso del que muchos no estaban de acuerdo, claro. Sin embargo, a pesar de tener muchas figuras locales en la cancha, ninguno de los dos cuadros mostró su mejor juego en la cálida noche del viernes en el coloso miraflorino.
Enrique Briceño, DT de Géminis, sorprendía al dejar en la banca a Carla Rueda. En su lugar, ‘Kike’ puso como titular a la juvenil Kyara Carrión. Por su parte, Carlos Aparicio, entrenador de las blanquiazules, envió a su mejor equipo al terreno de juego, con las hermanas Uribe liderando el pelotón.
Las aliancistas empezaron bastante aplicadas el set inicial. Aprovechaban cualquier ocasión para no dejar que las comeñas se les escapen. Hasta el punto 14 ambos elencos estaban igualados. Pero conforme transcurría el partido, Alianza evidenciaba ciertas deficiencias en defensa que las pupilas de Briceño traducían en puntos a favor de su escuadra. Al final, Géminis se llevó el set por un amplio 25-17.
Aparicio se dio cuenta que la recepción, y en especial la actuación de la líbero Thais Rojas, era su talón de Aquiles. Por eso, decidió el ingreso de la pequeñita, pero efectiva, Andrea Monzen. Mejorado este crucial aspecto, Zaira Manzo, la armadora del equipo, tuvo mayor comodidad para gestar los ataques íntimos que eran capitalizados especialmente por Mirtha Uribe. Así las cosas, Alianza Lima igualó el marcador al adjudicarse la segunda manga por 25-18 y hasta incluso se puso adelante al ganar también, por 25-18, el tercer set.
Briceño, viejo zorro en estas lides, tuvo buena lectura del juego y ordenó a Cancino, la armadora, que aprovechara los mortíferos ataques de zaguero de Patty Soto, ya que las aliancistas estaban más preocupadas en tapar las esquinas y el centro. Buena recepción + levantada de Ivonne + arremetida desde atrás de Soto = punto seguro para Géminis. Esa era la fórmula que le dio grandes dividendos a las de Comas para ganar el cuarto parcial por un holgado 25-15 y forzar el tie break.
Si algo ha sido una constante en el grupo que lidera Aparicio es que cuando decae emocionalmente, difícilmente logra recuperarse. No hay en ellas una actitud de rebeldía que es tan necesaria para sobreponerse a los tropiezos. La fortaleza mental del cuadro blanquiazul es tan débil como la aceptación a la gestión de la alcaldesa Susana Villarán por parte de los limeños.
Se jugaban los primeros minutos del quinto set y ya Géminis le había sacado una diferencia de nueve puntos a Alianza (10-1). Mucha ventaja para un parcial tan corto. El 15-4 final no hizo más que demostrar que Alianza sigue preso de sus propios fantasmas y que las de Comas si mantuvieran esa regularidad en un mayor porcentaje de los partidos, ya deberían ir sacando su boleto para nuevamente disputar el título al final de la temporada. Tal vez con lo que muestra actualmente les alcance, pero su juego está lejos de gustar. Géminis gana, pero no deleita.
LATINO HIZO LA TAREA
En el partido de fondo, la escuadra de Latino Amisa derrotó, en tres sets consecutivos, a Deportivo Wanka (25-15, 25-15 y 25-20). Este triunfo le permite a las dirigidas por César Arrese sumar tres puntos valiosos que las catapultan a la séptima casilla con 12 unidades.
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