La Confederación Brasileña de Vóleibol (CBV) anunció hoy que contratará una auditoría externa para evaluar los contratos de patrocinio de la entidad, después de que se destapase un escándalo de desvío de esos fondos.
El anuncio de la CBV fue realizado después de que la cadena ESPN destapase que parte de los fondos procedentes del patrocinio realizado por el estatal Banco do Brasil fueron transferidos a terceras empresas por la supuesta intermediación en la negociación de esos contratos.
Según publicó hoy ESPN, la CBV pagó 10 millones de reales (unos 4 millones de dólares) a la empresa S4G Gestão de Negocios, cuyo propietario, Fábio André Dias Azevedo, sería un hombre de confianza del actual presidente de la Federación Internacional de Vóleibol (FIVB) y anterior máximo responsable de la CBV, Ary Graça Filho.
Otro reportaje de ESPN reveló el mes pasado que la CBV desvió la misma suma a la empresa SMP, propiedad del superintendente general de la entidad, Marcos Pina, que fue destituido.
Según el Banco do Brasil, controlado por el Estado, la negociación del patrocinio, relativo al período 2012-2017, se realizó de forma directa con la CBV, sin intermediarios.
Murilo Endres, mejor jugador de los Juegos Olímpicos de Londres de 2012, criticó el caso de corrupción y afirmó que la destitución de Pina "no resuelve" la situación.
"El voleibol necesita de gente seria y honesta", afirmó Murilo en su cuenta de Twitter y lamentó que haya "gente enriqueciéndose" a costa de las "rodillas, hombros y tobillos" de los jugadores brasileños.
Fuente: terra.com.pe
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