LNSVF: ALIANZA VOLVIÓ A ESTRELLARSE CON SUS PROPIAS LIMITACIONES

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Fue un resultado previsible, pero esta derrota (1-3 con parciales de 27-25, 19-25, 15-25 y 15-25) al hincha aliancista le dolió en el alma. Quizá no tanto por el mal desempeño de sus integrantes, que dicho sea de paso todas, salvo Daniela, estuvieron en una mala noche. No, lo que le dolió al fanático blanquiazul fue darse cuenta de que con este plantel su equipo no tiene las armas suficientes para pelear el título. Luchará, eso sí es seguro, pero es poco probable que lo consiga. A menos que haga algo al respecto. 

Porque si bien es cierto Alianza dentro de todas sus limitaciones ha conformado un cuadro respetable, carece, exceptuando a las hermanas Uribe, de jugadoras de jerarquía. Pensemos en una posición más que clave para entendernos mejor: el armado.

En ese puesto tiene a Sandra Santana, una muchachita con muchas virtudes, pero que no tiene ni la experiencia ni la personalidad para liderar a su escuadra en los momentos más complicados de un partido. No tiene el carácter ni el temperamento para asumir la responsabilidad que debe arrogarse una armadora en el juego. Yerra un par de veces y se intimida, se muestra insegura y, como es lógico, contagia esa inseguridad y apatía a sus demás compañeras.

Vayamos ahora a la otra acera. San Martín en ese puesto tiene a dos jugadoras: Zoila La Rosa y Jessica Tejada. Cuando falla una, la pieza de recambio está lista para aportar lo suyo. ¿A quién tiene Alianza cuando no funciona Santana? He ahí la diferencia. Una de las tantas.

A pesar de eso, el panorama no es tan sombrío para las blanquiazules. ¿La razón? Es de los pocos equipos que todavía no ha hecho efectivo su opción de contratar a dos refuerzos extranjeros. “Vamos a tener un plantel con jugadoras 100% nacionales en la primera ronda. Después de eso veremos qué puestos son los que necesitamos potenciar con  los jales foráneos”, nos había dicho Carlos Aparicio hace algunos meses.  

Solo el tiempo revelará si el plan del entrenador íntimo fue el correcto. Por lo pronto, el aficionado aliancista espera que este domingo ante Wanka su escuadra recupere el tercer puesto que le ha sido arrebatado por Cristal. Pero, más importante aún, que recupere el amor propio, ese que anoche, sobre todo en los dos últimos sets, estuvo ausente.