jueves, 17 de octubre de 2013

GUILLERMO ORDUNA, DT DE ARGENTINA: “LA CAPTACIÓN DESCENTRALIZADA FUE LA CLAVE PARA NUESTRO CRECIMIENTO”


El entrenador albiceleste, cuyo equipo se medirá a la bicolor en el Pre Mundial, habla de cuán importante ha sido para el despegue del vóleibol de su país el trabajo sostenido en las categorías base. “Ese fue nuestro punto de partida que nos permitió la captación de nuevos talentos y el desarrollo de las futuras seleccionadas”, dice.

Del 18 al 20 de este mes, nuestra selección adulta se jugará su última chance de clasificar al Mundial Italia 2014. En el Pre Mundial, torneo que se disputará en la ciudad argentina de San Juan, el sexteto local será nuestro gran rival. Es más, la escuadra albiceleste, a juzgar por los últimos resultados y porque será repotenciado con sus ‘extranjeras’ que no vinieron al Sudamericano, parte como favorita.

A propósito de esa competencia que se avecina, conversamos en exclusiva con Guillermo Orduna, entrenador del elenco argentino, quien nos cuenta qué decisiones se tomaron en su país para que hoy en día tengan la segunda mejor selección de Sudamérica, solo por detrás de Brasil. Sí, aunque nos cueste admitirlo, Argentina ya nos relegó al tercer lugar.

Esta es su segunda etapa como entrenador de la selección adulta de Argentina. ¿Qué diferencias encuentra con el proceso anterior?
El vóleibol de ese entonces (mediados de los 90) era distinto: en cuanto al biotipo de las jugadoras, velocidad, juego, niveles físicos, planteos tácticos. El vóleibol ha evolucionado bastante.

¿Y en cuanto al equipo propiamente dicho?
En ese tiempo teníamos buenas jugadoras y muchas de ellas tenían una gran proyección para jugar en Europa, lo consiguieron pero por diferentes motivos no volvieron más a la selección. Incluso, algunas terminaron jugando para otros países. El proceso no se pudo sostener y ese buen grupo se perdió. Ahora, en esta nueva etapa, estamos apostando por la continuidad y el desarrollo de las categorías inferiores. Pretendemos aumentar el universo de jugadoras que lleguen no solo a la selección adulta, sino que puedan tener las condiciones de irse a jugar al extranjero.

¿Cuánto ha crecido el vóleibol argentino en los últimos años?
Muchísimo, sobre todo en las dos últimas décadas. Se ha venido trabajando durísimo desde las inferiores en todos los clubes del país, en el interior de la capital hay torneos importantes y frecuentes, a nivel nacional hay campeonatos desde la sub 14 hasta la sub 21. Como verás, le estamos dando bastante importancia a la categoría base, que para nosotros es un punto de partida que nos permite la captación de nuevos talentos y el desarrollo de las futuras seleccionadas. Una vez conseguido eso, toca que el grupo que llegue a mayores se posicione a nivel internacional como ha sucedido con el vóleibol masculino. En ese camino estamos.  

¿Qué otras decisiones ayudaron a que el vóleibol argentino femenino despegue?
Primero que nada nos dimos cuenta que, por ejemplo, no podíamos trabajar como se hace en Perú. Es decir, con selecciones permanentes, pues nuestro país es muy grande y por la distancia consideramos que no era el modelo a seguir. Tampoco podíamos hacer procesos muy cortos para el trabajo basándonos en el desarrollo de clubes porque realmente era muy heterogéneo el desarrollo en algunas zonas del país: en unos se entrenaba más, en otros se entrenaba menos. En unos había más competencia, en otros menos, así que también lo descartamos.

Entonces, decidimos implementar un año de captación de nuevas jugadoras recorriendo todo el país y los encargados de esa captación eran entrenadores capacitados. Después de ese año, previa evaluación, el grupo se vuelve más reducido y se empieza con las seleccionadas un trabajo especial que incluye concentración, recorrido por todo el país y la formación de la selección de pre menores. Se continúa el trabajo con ese grupo, se fortalece en menores y así hasta llegar a la selección adulta.

Este ha sido un programa que se ha sostenido en el tiempo más allá del paso de los entrenadores y ha permitido el surgimiento de nuevos talentos y el crecimiento de los seleccionados. Gracias a ese programa de captación hoy tenemos varias jugadoras actuando en Europa. La clave para nuestro crecimiento fue la implementación de una captación descentralizada.

Aunque a muchos de nosotros nos cueste admitirlo Argentina ya es la segunda selección más importante de Sudamérica. ¿El objetivo es mantener esa posición teniendo en cuenta que Brasil todavía está muy lejos para alcanzarlo?
Definitivamente. Nuestro objetivo es posicionarnos a nivel sudamericano en el segundo puesto y seguir creciendo cada vez más compitiendo en todos los torneos internacionales que se pueda, como los Grand Prix o los mundiales, por ejemplo. ¿Nuestro gran sueño? Clasificar por primera vez a unos Juegos Olímpicos, desde luego. Esa es la meta máxima.

Lo que se viene
¿Argentina es favorita en el Pre Mundial teniendo en cuenta su localía?
Siempre los locales parten como favoritos, pero nosotros tenemos que ser conscientes de que el nivel de todos los equipos es bastante parejo, y eso quedó demostrado en el Sudamericano.

En líneas generales, ¿cómo vio a su equipo en el Sudamericano?
Tuvimos un rendimiento irregular, no pudimos sostener un rendimiento promedio. El nivel que mostramos no fue el mismo que tuvimos en la Copa Panamericana, pero eso se debió también a las ausencias que sufrimos. El nuestro ha sido un equipo mixto: experiencia y juventud. Pese a eso, conseguimos mantener la medalla de plata.

¿Qué ambiente les espera a las selecciones que van a ir a San Juan a jugar el Pre Mundial? ¿Uno similar al de Ica, tal vez?  
No lo creo. A diferencia de Perú, en Argentina moviliza más el vóleibol masculino, pues tiene mucha historia. Esperemos que en esta ocasión tengamos el apoyo incondicional de nuestro público, aunque no creo que sea con la dimensión que ustedes tuvieron en Ica.

¿Qué concepto tiene del vóleibol peruano?
Perú es un país de una gran tradición voleibolística que está pugnando por recuperar el sitial que antes tuvo a nivel internacional. Está en un proceso de crecimiento y maduración, pero necesita tiempo y mucho trabajo para lograrlo. Lo importante es que no ceja en ese propósito, sigue invirtiendo y apostando por nuevas generaciones. Creo que ese es el camino, llegará el momento que cosecharán de lo que ahora están sembrando.

Algo más:

Orduna asumió las riendas de la selección argentina en enero de este año para encabezar el proyecto olímpico con vistas a Río 2016. Esta es su segunda etapa al frente de la albiceleste: la anterior abarcó entre 1991 y 1996. Orduna fue también asistente de Jon Uriarte en la selección adulta masculina.  

Crédito texto y foto: Michael Carrión 

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