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Daniela Uribe acaba de anotar el último punto y el coliseo Miguel Grau estalla de alegría. Natalia Málaga, quizá recordando sus épocas gloriosas como jugadora, corre a confundirse en un fuerte abrazo con sus dirigidas. Salta y brinca cual adolescente enamorada. No es para menos. La selección juvenil que dirige a ganado a la favorita del torneo, República Dominicana, por 3-1 y se alzó con en el título de la I Copa Panamericana de la categoría.
Las caribeñas por lo que habían mostrado a lo largo del torneo llegaban con cierto favoritismo. Y lo demostraron desde el arranque al llevarse con claridad el primer set por 25-18, ante un equipo peruano que no atinaba a nada. Mal inicio de las `matadorcitas` y los temores se acrecentaban en el coliseo chalaco.
Natalia decide para el segundo parcial el ingreso de una atacante que cada vez se consolida más en ese puesto: Gina López. La larguirucha jugadora fue fundamental para dotar al elenco nacional de mayores variantes en la ofensiva. Gracias a su aporte y al de la capitana Yllescas, Perú logró ganar este reñido set por 29-27.
Empatado el marcador las nuestras calmaron sus ansias y empezaron a jugar con mayor serenidad e inteligencia. Las jugadas rápidas por el centro hacían bastante daño a las visitantes, y eso las peruanas lo aprovecharon al máximo. López e Yllescas volvieron a ser vitales para adjudicarnos este parcial por 25-20 y estar a un paso del título.
El aliento de los hinchas crecía conforme transcurría la cuarta manga. Todo fue bastante parejo hasta el punto 10. Luego de eso, solo hubo un equipo en la cancha. Perú se adueñó del encuentro sacando a relucir su mejor juego. Las dominicanas, desconcertadas hasta más no poder, se mostraban incrédulas al ver que las nuestras avanzaban raudamente en el marcador. Pudimos sellar antes el triunfo, pero ni siquiera el amague de recuperación de las caribeñas nos hicieron dudar de que el título se quedaba en casa. El cuarto set fue nuestro por 25-17 y el júbilo de los presentes en el coliseo se desbordó.
Perú se coronó campeón de este torneo internacional. Además, lo hizo de manera invicta al ganar todos los partidos que disputó. De todos los sets que jugó, sólo cedió dos (ante Cuba y el de hoy ante República Dominicana). Sin duda, un título que nos invita a soñar que una medalla en el próximo mundial, que empieza el otro mes, no es ninguna utopía, si juegan siempre con esa clase e ímpetu que mostraron hoy. ¡Arriba Perú!
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