ADIÓS Y QUE TE VAYA BIEN

Fuente: elpoli.pe (Margarita Rivera)

Terminó el Mundial Juvenil de Voleibol Perú 2011 y, como era de esperarse, los cambios llegaron. El primero fue el pase de varias integrantes del plantel a la selección de mayores. El segundo, los movimientos en el comando técnico que consiguió el sexto lugar en la competencia.

Entre las variaciones en el comando técnico la primera partida fue la del español Juan Diego García, quien llegó para apoyar el sistema informático (data volley), durante el Mundial. El acuerdo con él era por ese tiempo y se cumplió a cabalidad.

Lo que sí ha sorprendido en las últimas horas es la confirmación que no se le renovó el contrato al preparador físico Otavio Machado. El brasileño cumplió una gran labor con las juveniles. Su función fue elogiada, incluso, por la entrenadora Natalia Málaga, quien expresó su deseo de continuar trabajando con él en la nueva etapa que asumirá en la selección, ya sea de menores o con las juveniles.

"En verdad hizo un gran trabajo. Las chicas, todos lo vieron, no presentaron ningún problema en el estado físico. Él también estaba interesado en quedarse. Veremos qué hacer en adelante", comentó algo mortificada la técnica.

LO QUE NADIE SABE
El propio Otavio Machado se mostró sorprendido por la decisión de la FPV. Y no solo por la labor que cumplió, sino por el sacrificio que hizo para permanecer en el equipo. Nadie o muy pocos conocen que hace poco más de tres meses sufrió una rotura de meniscos y del ligamento cruzado anterior de la rodilla.

La lesión se produjo en Eslovaquia, durante la gira que realizó la selección juvenil por Europa. Debido a los compromisos del elenco, prefirió postergar su operación hasta después del Mundial, con la promesa de la FPV de asumir el costo, lo que, sin embargo, aún no se ha producido.

"Yo regresaré mañana (9 de agosto) a mi país. Ya me cancelaron mi sueldo y lo acordado. Solo falta lo de mi operación, que prefiero hacerla en mi país, porque allá te solucionan el problema con una sola intervención", contó el preparador físico.

¿Qué explicación te dieron sobre no renovarte contrato?
Nada. El problema es que querían renovarme, pero bajándome mi sueldo a la mitad y yo no acepté eso. Creo que hice un buen trabajo y puedo hacer más. Puedo seguir con el mismo sueldo, no hay problema, ¿pero bajarlo al 50 por ciento?

¿Y qué piensas hacer ahora?
Me regreso a mi país. Ya inicié contactos con otros equipos. Dentro de poco comenzará la temporada europea y es probable que pueda llegar allá.

Imagino que esto te sabe a maltrato...
Me apena, porque, como te conté, he trabajado con una lesión y creo que mi labor fue buena. Además, me están debiendo el costo de la operación que debo hacerme apenas vuelva a mi país. Pero, bueno, así son las cosas.

¿Hablaste con Natalia?
Sí, ella ha estado muy pendiente de mí. Hablará por mí. No está de acuerdo con esto. Pero ya saben que, al final, los que deciden son las autoridades. Igual yo me voy muy agradecido y contento con ella. Fue muy grato trabajar juntos.

¿Qué estuviste haciendo en los días post mundial?
Estuve yendo al gimnasio, para no perder fortaleza en tanto se resuelve mi lesión quirúrgicamente. También estuve conversando por skype con amigos que están en Brasil y otros que ya están entrenando en Europa. Veremos qué pasa.

¿Te vas molesto del Perú?
No, para nada. Es un país lindo y la gente es muy buena.

¿Hablaste últimamente con el presidente de la Federación?
La última vez me dijo que hablaría con Natalia. Me prometió enviarme el dinero para mi operación al Brasil. Confío en que así sea.

Otavio Machado estuvo en el Perú poco más de medio año. Llegó a fines de enero y trabajó durante un tiempo con el combinado mayor-juvenil que estuvo a las órdenes de Natalia Málaga, tras el Mundial de mayores Japón 2010. Después se dedicó junto a Natty a las juveniles.

Su labor salta a la vista. Si no que lo digan las tres juveniles que tan pronto termino el Mundial viajaron y están jugando el Grand Prix con las mayores. Habría que aprender a valorar mejor el trabajo de los profesionales.