sábado, 30 de julio de 2011

MUNDIAL JUVENIL: ABRAZADAS A UNA ILUSIÓN



Los dirigentes de la Federación Brasileña de Voleibol ya deben estar separando un lugar en las vitrinas donde guardan sus trofeos, pues su selección está muy cerca de sumar su sétima corona mundial en esta categoría. Y es que, a pesar que tuvo que definirlo en cinco sets, el sexteto brasileño derrotó en la segunda semifinal al corajudo elenco de Estados Unidos 3-2 y disputará mañana ante Italia la final del Mundial Juvenil.

Brasil era el favorito, pero las pupilas de Luizomar de Moura sabían que era en la cancha donde tenían que ratificarlo. Y lo hicieron ni bien empezó el partido. Con un gran despliegue y vistosidad de sus atacantes, las sudamericanas se ponían adelante en el marcador al ganar el primer set por 25-15, en veintidós minutos de juego.

Las ‘garotas’ querían terminar rápido esta historia para evitar el desgaste físico pensando ya en la final. Pero las estadounidenses no le pusieron tan fáciles las cosas. Por el contrario, obligaron a las brasileñas a esforzarse al máximo -las ‘cariocas’ salvaron tres bolas inverosímiles que derivaron en puntos para ellas- para llevarse el segundo parcial por 25-19.

El que menos pensaba que la victoria brasileña ya estaba sentenciada. Menos las norteamericanas, claro. Y es que, en un ejemplo de amor propio y vergüenza deportiva, se recompusieron anímicamente y le jugaron de igual a igual a las compatriotas de Pelé. Fue en estos momentos de extrema necesidad para Estados Unidos, que emergió la figura de Halley Eckerman, quien con sus ataques diagonales derribó la barrera defensiva de Brasil y ayudó a su elenco a ganar la tercera manga por 25-20.

Y si en el set anterior el ataque de Estados Unidos había mejorado, en el cuarto juego su alto bloque lo hizo más todavía. Comandados por la gigante Haleigh Hampton (199 centímetros), las dirigidas por el profesor Robert Browning neutralizaron las arremetidas de las sudamericanas, por lo que obligó a su entrenador a cambiar a gran parte de su cuadro empezando por su armadora Priscila Heldes. Lo propio había hecho el estratega ‘gringo’ al sustituir a su levantadora Lauren Plum por Hannah Allison, dándole sus variantes mejor resultado que a su rival, pues terminaron ganando el parcial por 25-20 y en consecuencia empataron el partido.

¿Se caerían anímicamente las brasileñas? Los equipos grandes tienen que demostrar toda su jerarquía en esta clase de situaciones. Y Brasil lo hizo a pesar que tuvo que emplearse a fondo para llevarse este set, pues los dos equipos llegaron a estar empatados 14-14. Pero un error de la estadounidense Eckerman y un gran ataque que culminó a la perfección Ana Correa, permitió al vigente campeón sudamericano, sellar su victoria al adjudicarse por 16-14 en este vibrante parcial.

Fin del partido y las lágrimas de las estadounidenses caían sin pudor. Estuvieron muy cerca el triunfo, pero tuvieron al frente a un rival como Brasil que no por algo es el equipo que ocupa el primer lugar del mundo en la actualidad. Además, no por nada ha ganado seis veces esta competición. Y se va por la sétima. ¿Lo logrará? Mañana lo sabremos.


No hay comentarios:

Publicar un comentario